Terminados los trastornos somatomorfos, hoy me quedo con un cruel trastorno: el trastorno dismórfico corporal.
Os lo defino:
Consiste en preocupación por algún defecto imaginado del aspecto físico. Si existe anomalía física, la preocupación es excesiva.
La preocupación provoca un malestar significativo, y afecta a las distintas áreas de la vida.
La preocupación no se explica mejor por la presencia de otros trastornos mentales.
Suele ser por motivos como el acné, el vello corporal, por cicatrices, o por partes del cuerpo. Pueden pasar horas comprobándo y revisándolos en el espejo. La conciencia sobre su distorsión es muy pobre, algunos llegan a ser delirantes. No se dan cuenta de que están percibiendo exageradamente partes de sí mismos, y además, no se les puede convencer de ello.
Suele comenzar en la adolescencia, y curiosamente también en el período menopáusico. Tiene un curso crónico, con remisiones y exacerbaciones, pero muy rara vez remiten completamente. Con la cronificación no siempre se preocupan por el mismo defecto, pueden darse varios a la vez, o ir cambiándose con el tiempo.
Este trastorno puede llegar a ser muy incapacitante, porque por vergüenza la persona va aislándose.
No hay que confundirlo con la anorexia nerviosa, porque ésta se limita a preocupaciones sobre el peso, ni con el trastorno delirante somático, porque tiene contenido bizarro, es decir, delirante, no realista.
A la hora de la intervención, hay que dejarle muy claro al paciente que el objetivo del tratamiento es ayudarle a cambiar su propia percepción corporal, no a cambiar su apariencia. Tiene que tolerar y aceptar su cuerpo, para posteriormente, quererlo.
Otro aspecto a tener en cuenta sería la prevalencia de este trastorno en los historiales de los centros de operaciones estéticas. ¿Se controlan este tipo de cosas en las personas que se quieren operar, o quizás queda en segundo plano justo por detrás de los intereses económicos?
¿Cuántas personas conocéis que, a pesar de lo maravillosas y preciosas que son, se vienen abajo por un detalle de su cuerpo? ¿Qué es un "michelincito", tres pelos, un granito o una cicatriz? ¡¡¡Señor@s, que somos human@s!!! Vamos a querernos más, que cada uno de nosotr@s somos seres únicos e irrepetibles.
¡¡¡ ENTÉRATE !!! ¡¡¡ NO HAY NADIE COMO TÚ !!!
claro que sí, somo únicos y estamos buenísim@s ajjaja, la verdad es que en muchas centros de cirugía estética lo que prima es el parné que van a ganar con las operaciones, pocos médicos tienen esa moral ética de decirles a sus paciente "basta". aunque en realidad...si ese médico no le opera, se irá a otro que sí lo hará...debemos de pensar que estamos haciendo en nuestra sociedad, claro está que ha todos nos gusta sentirnos guap@s y gustar...pero si tú no te gustas...no podrás gustar a nadie!
ResponderEliminarUn beso, Mariló.
Eso precisamente es lo que más refleja lo preocupante del tema Mariló, el hecho de que si un médico dice "basta", y no la opera, habrá mil médicos que sí lo harán...
ResponderEliminarGracias por seguir el blog!